Hace ya mucho tiempo que Castil de Carrias empezó a formar parte de “Los pueblos del silencio”
(Elias Rubio Marcos). En este libro te puedes informar sobre este pueblo y de otros que ya están totalmente abandonados.
Parte posterior de la iglesia
Iglesia de Santa María
Mi buen amigo Emiliano, un gran compañero y mejor persona, fue uno de los últimos habitantes de Castil de Carrias.
Esta poesía de Juan Ramón Jiménez, a la que solo le he cambiado el nombre del pueblo,serviría para expresar lo que Emiliano sentía por su pueblo.
Cuando yo era el niñodiós, era Castrillo, este pueblo,
una blanca maravilla; la luz con el tiempo dentro.
Cada casa era palacio y catedral cada templo;
estaba todo en su sitio, lo de la tierra y el cielo;
y por esas viñas verdes saltaba yo con mi perro,
alegre como las nubes, como los vientos , lijeros,
creyendo que el horizonte era la raya del termino.
En el año 2012 tuvo cierto renombre por la zona debido a que en
esta localidad se rodó la película “Gernika bajo las bombas” y
bastante personas de Briviesca intervinieron de figurantes
Su iglesia estaba dedicada a Santa María y actualmente está
en ruinas. Todos los pueblos castellanos, por muy pequeños que fuesen, tenían su iglesia y es que como expresa Machado en su poema de Alvargonzález:
Feliz vivió Alvargonzález
en el amor de su tierra.
Naciéronle tres varones,
que en el campo son riqueza,
y, ya crecidos, los puso,
uno a cultivar la huerta,
otro a cuidar los merinos,
y dio el menor a la Iglesia.
Así Castilla además del trigo y de los soldados también aportó gran cantidad de sacerdotes y misioneros. Todavía tiene muchos religiosos repartidos por América y África.
Durante más de veinte años trabajé con un nacido en este pueblo, mi amigo Emiliano, del cual puedo decir que fue un excelente compañero y una gran persona.
Feliz vivió Alvargonzález
en el amor de su tierra.
Naciéronle tres varones,
que en el campo son riqueza,
y, ya crecidos, los puso,
uno a cultivar la huerta,
otro a cuidar los merinos,
y dio el menor a la Iglesia.
Así Castilla además del trigo y de los soldados también aportó gran cantidad de sacerdotes y misioneros. Todavía tiene muchos religiosos repartidos por América y África.
Durante más de veinte años trabajé con un nacido en este pueblo, mi amigo Emiliano, del cual puedo decir que fue un excelente compañero y una gran persona.
Parte posterior de la iglesia
Iglesia de Santa María
Esta poesía de Juan Ramón Jiménez, a la que solo le he cambiado el nombre del pueblo,serviría para expresar lo que Emiliano sentía por su pueblo.
Cuando yo era el niñodiós, era Castrillo, este pueblo,
una blanca maravilla; la luz con el tiempo dentro.
Cada casa era palacio y catedral cada templo;
estaba todo en su sitio, lo de la tierra y el cielo;
y por esas viñas verdes saltaba yo con mi perro,
alegre como las nubes, como los vientos , lijeros,
creyendo que el horizonte era la raya del termino.
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